miércoles, 29 de junio de 2011

¿Qué hace un escritor viejo cuando sabe que se está muriendo" Comentario a raiz de la lectura de "Diarios 1984-89" de Sandor Marai


En el 2008, Editorial Salamadra publica la última colección de Diarios del escritor húngaro Sandor Marai. Por casi sesenta años, Marai se dedicó a escribir una serie de "diarios abiertos" en los que recopilaba reflexiones, comentarios acidísimos acerca de la democracia norteamericana y su cultura del consumo, recuerdos del ya desaparecido Imperio Habsburgo que le dio contexto a la revolución burguesa del 1848 en Hungría y a los proyectos de vida y rebeldías de Sandor Marai. También habla mucho en esos diarios sobre el exilio.

Pero, la verdad, la recopilación de los diarios que comprenden y comentan los últimos 5 años de su vida son un gran regalo para los amantes de la lectura.

¿Qué hace un viejo escritor cuando sabe que se está muriendo? O mejor aún planteado ¿qué hace un viejo escritor, agnóstico, anti-ideológico, capaz de encontrarle el pulso vivo a las palabras cuando ve morir a todos los que ama y se ve morir a sí mismo? Ese escritor lee, reflexiona y escribe. Alcanza una honestidad de visión, una mordacidad y una brillantez de criterio deslumbrante.

En estos últimos diarios, Sandor Marai relata la muerte de su esposa Ilona, de sus hermanos, todos menores que él, de intelectuales y escritores coetáneos. Se retrotrae a su pasado, en específico a un episodio - una cena en Leányfalu, en un piso que quedó derrumbado durante la 2nda Guerra Mundial y que lo forzó al exilio. Vuelve a esa cena con insistencia, a sus lecturas con inisitencia y a una cruda reflexión sobre la muerte que le da coherencia a todo el tomo de diarios. Casi se lee como una novela. LCasi es lo mejor que he leído (digo casi porque sigo prefiriendo a El último encuentro) de Sandor Marai.

Aquí algunas de las frases luminosas de este diario. (Sin frases luminosas, un libro es tan sólo un objeto descartable, indefinidamente reemplazable por otro):

Sobre el exilio
"En el oceáno se encuentra todo, hasta la patria" (55)

"Tal vez halle un país, una cuidad, un refugio, pero nunca encontrará aquello por lo que un día decide regresar: el ambiente del hogar que lo vio nacer. Anda asfixiado en un lugar extranjero que se ha vuelto muy familiar, no puede respirar. (175)


Describiendo a una gaviota
"No ve hacia al frente. No conoce otro horizonte que la perspectiva conjunta del hemisferio derecho e izquierdo. Es como el ideólogo, que sólo sabe dividir la humanidad en dos categorías absolutas. La izquierda o l derecha. Sin embargo, es posible ver hacia adelante... Para ello es preciso tener dos dedos de frente y los ojos adecuadamente dispuestos (58)


sobre la democracia estadounidense.

"La explotación comercial de la agonía es algo típicamente americano; me parece poco probable que haya algo aprecido en otros lugares del mundo". (61)

La prueba de la democracia es el duelo; el bendito pueblo no juzga la capacidad política de los candidatos, sino si nos apuertos o no, si saben encontrar el punto flaco del contrincante y soltarle cuatro verdades, si saben actuar, cómo es su mímica, sus getos... Ese duelo de juglares me asusta. (67)



Sobre la escritura
Hay pocos escritores que saben combinar la realidad con el prodigio (70)

Edipo no tiene complejo de Edipo. Lucha contra los hechos, no contra el complejo(112)

Sobre la muerte de Borges.
Borges observó al hombr argentino con la dedicación de un ontólogo , y descubrió en él a un animal religioso. (167)


Este libro es una joya. Disfrútesela. Lo hará brillar por dentro.